VIÑAC DE DUELO, DEJÓ DE EXISTIR EN LA CAPITAL SU EX – ALCALDE DANIEL AURIS ARBIZU
Por: Manuel Madueño Ramos
Por: Manuel Madueño Ramos
No hace mucho tiempo lamentábamos por la fortuita desaparición de Casimiro Perales Odría, ex –alcalde del distrito de Madeán; y el día 17 de junio del presente, un día muy especial para mi persona, dejó de existir Daniel Auris Arbizu, también ex –alcalde del distrito de Víñac. Ambos personajes todavía estaban en la plenitud de su existencia, a simple vista se encontraban bien de salud, pues no habían llegado a la senectud propiamente dicha, pero cuando la enfermedad avanza no hay cuerpo que pueda resistir por más tiempo e irremediablemente dejan de existir y sin más remedio marchar al lugar donde van reyes y monarcas, generales invencibles. Nadie se escapa de la muerte.
Daniel Auris Arbizu, nació en el distrito de Víñac, un 15 de diciembre de 1931; sus padres fueron don Agripino Auris Centeno y doña Valeria Arbizu Guerra, ella natural de “Casanmayo” anexo de Apurí. De los seis hermanos, tres yacen bajo la tierra, en el cementerio general de Víñac: Macedonia, Eladio Alejandro y Daniel; los que viven: el Dr. Luis Beltrán, Viviano y Prepodina Auris Arbizu. Estudió en el Centro Escolar 470 de la ciudad, creado por el maestro Germán Caro Ríos, semillero de los grandes hombres que escribieron una hermosa historia de amor y de vida; muchos de ellos siguen viviendo en la plenitud de sus facultades físicas y mentales dando ejemplo de trabajo y perseverancia.
Por los años de 1973- 1974, el pueblo lo eligió alcalde del distrito, porque vio que tenía cualidades innatas para gobernar y no defraudó, porque durante la Gestión Municipal, adquirió un Grupo Electrógeno, transportándolo durante dos días desde la ciudad incontrastable de Huancayo, cruzando cumbres nevadas, soportando las torrenciales lluvias y el frío inclemente de las noches. Instalado en la localidad, iluminó las calles y en todo el domicilio de la población. Era un gigantesco salto a la modernidad y al progreso que muchos distritos de la zona sur de Yauyos, carecían de este vital elemento del mundo moderno.
La luz que proporcionó este Grupo Electrógeno, sirvió para que los alumnos del Colegio Nacional “Santiago de Víñac”, mediante un amplificador y con la tutoría de los profesores irradiara todas la noches por “Radio Santiago”, los programas extracurriculares dando conocer a la población y al vecino pueblo de Madeán: canciones, poemas y concursos como “El que estudia triunfa” ocupando una sintonía total. Esta acción educativa benefició a los educandos para que muchos de ellos se dedicaran a estudiar más y mejor, otros dedicándose a la difusión de programas radiales en la capital. Ahora tenemos luz todo el día, parece que el entusiasmo y la energía de otros tiempos han desaparecido. Un jalón de orejas a los maestros del lugar que duermen el sueño de los justos.
El mal que lo llevó a la tumba al ex –alcalde fue un cáncer generalizado. Hace algunos años, apareció en el cerebro un pequeño tumor que con el correr de los años fue in crescendo igual que el dolor fue en aumento. Cuando éste se hizo insoportable fue curado con remedios caseros, pero el mal fue agravando. El Dr. Luis B. Auris, al tener conocimiento la enfermedad de su hermano viajó desde la Merced, provincia de Satipo, departamento de Junín donde ha fijado su domicilio, trasladándole a la capital, pero el mal había avanzado. Internado en el Hospital Hipólito Unanue, los médicos nada pudieron hacer para salvarle la vida, dejando de existir, ante la tristeza y pesar de sus familiares.
Los restos mortales fueron velados en el distrito de San Juan de Lurigancho, en la casa de su cuñado Ascensión Madueño Rojas. Estuvieron presentes en su velatorio su esposa Teofila Evangelista; sus hermanos: Luis Beltrán y Viviano Auris Arbizu con sus respectivas esposas Olinda Rodríguez Salvador y Rosa Evangelista Huari; sus primos Juan, Daniel, Fabio y Paulina Arbizu Vilcapuma; además sus sobrinos: Dámazo, Fidel, Maruja, Alfonso, Magno y Aníbal Madueño Auris, su sobrina Marina Auris Centeno; de igual manera Julio Evangelista Chávez y Teofila Evangelista Centeno.
Al día siguiente 18 de junio el féretro fue trasladado en un vehiculo especial al distrito de Víñac, donde fue objeto de un homenaje especial por haber sido una de las autoridades más importantes del pueblo. Y el 19 de junio, acompañado de una Orquesta Típica Folclórica del pueblo de Apurí y la Banda de Músicos del distrito de Madeán, el ataúd recorrió por última vez las calles de su pueblo donde nació, creció y vivió recibiendo el postrero adiós, luego al lugar de su eterno descanso. En el campo santo hizo uso de la palabra su hermano el Dr. Luis Beltrán, Viviano Auris Arbizu y el señor Victoriano Chávez Evangelista, Director del Colegio “Santiago de Víñac”, resaltando las virtudes y bondades del amigo, del hermano que muchas veces reemplazó al padre, cuando éste se encontraba ocupado en trabajos de la comunidad.
Gloria eterna a nuestros gobernantes, que cumplido su ciclo de vida nos abandona. Fue sepultado al lado de sus padres como era su deseo. Hasta siempre don Daniel, tu fortaleza y tu espíritu vivirá con nosotros.
Daniel Auris Arbizu, nació en el distrito de Víñac, un 15 de diciembre de 1931; sus padres fueron don Agripino Auris Centeno y doña Valeria Arbizu Guerra, ella natural de “Casanmayo” anexo de Apurí. De los seis hermanos, tres yacen bajo la tierra, en el cementerio general de Víñac: Macedonia, Eladio Alejandro y Daniel; los que viven: el Dr. Luis Beltrán, Viviano y Prepodina Auris Arbizu. Estudió en el Centro Escolar 470 de la ciudad, creado por el maestro Germán Caro Ríos, semillero de los grandes hombres que escribieron una hermosa historia de amor y de vida; muchos de ellos siguen viviendo en la plenitud de sus facultades físicas y mentales dando ejemplo de trabajo y perseverancia.
Por los años de 1973- 1974, el pueblo lo eligió alcalde del distrito, porque vio que tenía cualidades innatas para gobernar y no defraudó, porque durante la Gestión Municipal, adquirió un Grupo Electrógeno, transportándolo durante dos días desde la ciudad incontrastable de Huancayo, cruzando cumbres nevadas, soportando las torrenciales lluvias y el frío inclemente de las noches. Instalado en la localidad, iluminó las calles y en todo el domicilio de la población. Era un gigantesco salto a la modernidad y al progreso que muchos distritos de la zona sur de Yauyos, carecían de este vital elemento del mundo moderno.
La luz que proporcionó este Grupo Electrógeno, sirvió para que los alumnos del Colegio Nacional “Santiago de Víñac”, mediante un amplificador y con la tutoría de los profesores irradiara todas la noches por “Radio Santiago”, los programas extracurriculares dando conocer a la población y al vecino pueblo de Madeán: canciones, poemas y concursos como “El que estudia triunfa” ocupando una sintonía total. Esta acción educativa benefició a los educandos para que muchos de ellos se dedicaran a estudiar más y mejor, otros dedicándose a la difusión de programas radiales en la capital. Ahora tenemos luz todo el día, parece que el entusiasmo y la energía de otros tiempos han desaparecido. Un jalón de orejas a los maestros del lugar que duermen el sueño de los justos.
El mal que lo llevó a la tumba al ex –alcalde fue un cáncer generalizado. Hace algunos años, apareció en el cerebro un pequeño tumor que con el correr de los años fue in crescendo igual que el dolor fue en aumento. Cuando éste se hizo insoportable fue curado con remedios caseros, pero el mal fue agravando. El Dr. Luis B. Auris, al tener conocimiento la enfermedad de su hermano viajó desde la Merced, provincia de Satipo, departamento de Junín donde ha fijado su domicilio, trasladándole a la capital, pero el mal había avanzado. Internado en el Hospital Hipólito Unanue, los médicos nada pudieron hacer para salvarle la vida, dejando de existir, ante la tristeza y pesar de sus familiares.
Los restos mortales fueron velados en el distrito de San Juan de Lurigancho, en la casa de su cuñado Ascensión Madueño Rojas. Estuvieron presentes en su velatorio su esposa Teofila Evangelista; sus hermanos: Luis Beltrán y Viviano Auris Arbizu con sus respectivas esposas Olinda Rodríguez Salvador y Rosa Evangelista Huari; sus primos Juan, Daniel, Fabio y Paulina Arbizu Vilcapuma; además sus sobrinos: Dámazo, Fidel, Maruja, Alfonso, Magno y Aníbal Madueño Auris, su sobrina Marina Auris Centeno; de igual manera Julio Evangelista Chávez y Teofila Evangelista Centeno.
Al día siguiente 18 de junio el féretro fue trasladado en un vehiculo especial al distrito de Víñac, donde fue objeto de un homenaje especial por haber sido una de las autoridades más importantes del pueblo. Y el 19 de junio, acompañado de una Orquesta Típica Folclórica del pueblo de Apurí y la Banda de Músicos del distrito de Madeán, el ataúd recorrió por última vez las calles de su pueblo donde nació, creció y vivió recibiendo el postrero adiós, luego al lugar de su eterno descanso. En el campo santo hizo uso de la palabra su hermano el Dr. Luis Beltrán, Viviano Auris Arbizu y el señor Victoriano Chávez Evangelista, Director del Colegio “Santiago de Víñac”, resaltando las virtudes y bondades del amigo, del hermano que muchas veces reemplazó al padre, cuando éste se encontraba ocupado en trabajos de la comunidad.
Gloria eterna a nuestros gobernantes, que cumplido su ciclo de vida nos abandona. Fue sepultado al lado de sus padres como era su deseo. Hasta siempre don Daniel, tu fortaleza y tu espíritu vivirá con nosotros.